Aceptas el desafio, crees que vas a ganar, estás más que confiado, pero...algo te hace dudar, justo en la meta, donde te obligas a admitir que no estas preparado para algo así.
Entonces bajas los brazos, ya nada más importará, pero sabes que detrás hay algo más, algo que tal vez podrías lograr.
Sabes, y sientes y piensas en lo más lindo y lo más triste, sólo para darte cuenta que todo esto ni sirve. Si te arriesgaste, no queda más que intentar ganar aquello por lo cual luchar.
Sin dudas ni temores, continúas y corres, los obstáculos son complicados, tanto como ayer. El rival te mira desde lejos, con una sonrisa fatal, una sonrisa que te demuestra que ya no puedes ganar. Sin embargo, sacas fuerzas desde adentro y comienzas a triunfar lo que te habías propuesto en aquel lugar...
By Lali Scafati.~
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