Pienso. Sí, aunque cueste creerlo, pienso (jaja). Y últimamente, demasiado. Pero vos me vas a decir: siempre pensamos!. Si, vivimos pensando. Pero estos pensamientos que se me cruzan últimamente son muy particulares. Pienso en cosas que no sucedieron, no suceden y no se si sucederán. Más que nada, mis pensamientos se convierten en ilusiones. Porque uno se hace el matete a más no poder con cosas que queres que pasen, con pensamientos buenos y positivos, con momentos dulces y tiernos, con pensamientos que vos decís 'que loco estar pensando en esto!'.
Y dale, creo que estas cosas nos pasan a todos. Todos nos ponemos a pensar en el futuro, en lo que queremos que suceda, nos ilusionamos y después de tanto SOÑAR nos chocamos con la REALIDAD. Esa realidad imposible de evitar. Eso que nos dice: 'para, para, para, hasta acá llegamos man!'. Y ahí viene este famoso 'choque con la realidad' y todos esos pensamientos que se convirtieron en ilusiones, que a la vez son nuestros sueños se desmoronan para volver a la rutina y a la REALIDAD. Y nos volveremos a encontrar con ellos cuando estemos pensando en algo que no tenga que ver con nuestra vida cotidiana, nos volveremos a encontrar con ellos cuando queramos alimentarnos de sueños y esperanzas, cuando queramos transportarnos a otro lugar para ver las cosas desde otra perspectiva, para pensar que tal vez eso puede suceder. Pero como dije, "no se si sucederá", pero les aseguro que esos momentos son plenos y puros, y van cambiando a lo largo del tiempo y nuestra vida. Quien dice que tal vez el día de mañana ni tengamos tiempo de pensar en otra cosa que no sea nuestra realidad, que no haya momentos para ilusiones. Por eso, a soñar. Sí, a soñar, que total es gratis y con eso alimentamos el alma y la llenamos de fervor y esperanza.
By Lali Scafati
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